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La aplicación, de gran popularidad entre creadores
Instagram, la aplicación para dispositivos móviles lanzada por sus creadores Kevin Systrom y Mike Krieger a finales de 2010 y comprada por Facebook a mediados de 2012, goza de gran popularidad entre los usuarios.
Se trata de una red social desde la cual publicas y compartes fotos y vídeos, a los que puedes aplicar filtros, marcos, entre otros efectos.
El inquieto mundo del arte no ha permanecido ajeno a la aplicación y ha sabido colarse para aprovechar a tope los beneficios que su uso puede aportar.
Creadores y artistas de todo el mundo comparten proyectos completos, detalles de obra, procesos de creación y minicápsulas documentales, con los que buscan entrar en contacto directo no sólo con sus fans sino también con posibles compradores.
Las galerías y casas de subastas han encontrado en Instagram un gran aliado no sólo para la promoción de sus piezas sino también para aumentar el interés de compradores jóvenes y nuevos coleccionistas, pues representan un porcentaje que va en crecimiento en sus ingresos. Artistas de gran trayectoria como Ai Weiwei (en Instagram como aiww), nos dejan echar un vistazo a momentos de su vida cotidiana, fragmentos de obras, exposiciones y presentaciones.
Humor en el arte
Curiosos proyectos como “Great Masters Having Great Times” del artista brasileño Lorenzo Castellini (en Instagram como art.lies) nos muestran también el lado humorístico desde el cual se puede abordar el arte. Recortes de retratos de famosas pinturas sirven para intervenir la vida cotidiana en las calles de Sao Paulo, “la invasión de la pintura clásica al espacio contemporáneo”. Los hashtags son el ingrediente clave para curadores y usuarios en esta red social, ya que facilitan y enriquecen la experiencia de búsqueda.
Casi todas la exposiciones hacen uso de etiquetas especialmente creadas para la promoción y participación de los visitantes. Con el hashtag #ArquiMoMA la exposición “Latinoamérica en construcción: Arquitectura de 1955 a 1980”, el Museo de Arte Moderno de Nueva York convocó a la participación de usuarios que compartieron fotografías de edificios icónicos en su contexto actual, apareciendo las imágenes en pantallas colocadas en una sección especial de la exposición.
El controversial caso del fotógrafo y artista estadounidense Richard Prince y su colección “New Portraits” de 37 retratos que realizó a partir de imágenes tomadas de diferentes usuarios de Instagram sin su autorización llevaron las miradas del mundo del arte hacia la aplicación.
Creativas estrategias como la de los diseñadores holandeses de la firma de alta costura Viktor&Rolf, que en julio pasado realizaron la original subasta de una de sus piezas de colección otoño-invierno, demostraron que en Instagram lo importante no era ser el más rico ni el más famoso, sino el más creativo.
Usando el hashtag #ArtAuctionViktor&Rolf los interesados debían subir una fotografía, ilustración o cualquier objeto inspirado en la colección de los diseñadores.
A pesar de las estadísticas que demuestran que el número de usuarios en Instagram ha ido a la baja con la aparición de aplicaciones como Snapchat, esta red social sigue dando batalla y renovándose en su formato que dará más flexibilidad a las publicaciones de los usuarios.— Aída Barrera Pino para “El Macay en la cultura”