Un fotógrafo nómada

Un fotógrafo nómada

Comparte Julio Camil lo visto al recorrer el mundo

Un reflejo de su deambular por el planeta ofrece el fotógrafo Julio Camil en su exposición titulada “Universo”, inaugurada el pasado viernes en la sala 8 Bis del Museo “Fernando García Ponce” Macay.

“Ya soy una persona grande, he andado por muchos lugares y tengo muchos años retratando, casi toda una vida. Y estas fotografías, este acervo, es el reflejo precisamente de ese deambular por el planeta”, indica.

La muestra, de 19 imágenes, incluye rostros, paisajes, suelos y diversidad de imágenes de los viajes del fotógrafo mexicano, quien posee una trayectoria de más de 30 años.

“Mujer de barrio alto”, de Lisboa, Portugal; “Mar de Galicia”, Mar de Santander, España; “Sahara Occidental I”, “Dunas desierto”, Coahuila, México; “Niñas con gaviotas”, Mar Caribe, México; “Ofrenda”, Michoacán, son algunas de las fotografías que integran la muestra.

Durante ese tiempo, el fotógrafo ha visitado cuatro continentes, excepto Oceanía. “Me faltan muchos lugares, pero no me va alcanzar el tiempo”.

En su andar por el mundo, él disfruta capturar momentos con su cámara. Para hacer una buena foto “hay que tener la fortuna, la suerte de estar en el lugar, tener el equipo y saber cómo captar ese momento”.

Julio Camil es originario de Torreón, Coahuila y reside por temporadas en Morelos, Yucatán y Ciudad de México.

Con vocación nómada

Es un fotógrafo inquieto, con vocación nómada, “así deben de ser los que se dedican al oficio sino qué van a ver… Hasta en una ciudad, si queremos las fotos, te tienes que mover”.

Considera que todos los lugares que ha visitado tienen maravillas. “Si vas a la sierra de Oaxaca es maravilloso; si vas a la Sierra Tarahumara, en lo profundo, hay loros, nutrias, limones, mangos, y en la parte de arriba estás viendo nieve. Son lugares que en México los tenemos, son maravillosos. Y en Europa también”.

De las fotos de la exposición, detalla que la del mar de Galicia, que califica como “bellísima”, la consiguió aunque para tomarla tomó el riesgo de caer al agua. Recuerda que estaba lloviznando y que las rocas eran muy resbalosas, por lo que tuvo que caminar con zapatos de hule para no resbalar para poder acercarse lo más que pudiera donde reventaba la ola para tomar esa imagen con ese encuadre, aunque significara correr el riesgo de caer al fondo del mar con todo y cámara.

En otras ocasiones, al tratar de conseguir sus fotos, ha sufrido accidentes. “En manifestaciones en Ciudad de México, cuando empiezan a llover las piedras hay que esconderse y muchas veces me ha tocado”, comenta. “La violencia te toca y es complemento del oficio de periodista”.

Platica que es fotoperiodista independiente, “no me ha gustado trabajar con un medio aunque trabajé con uno una vez porque cortan tu libertad, entonces es preferible quedarte con la imagen aunque no te la publiquen, pero algún día alguien la va a rescatar de tu acervo y estás haciendo lo que te gusta, lo que quieres hacer”.

Acceso

“Universo” es itinerante y su siguiente parada sería San Miguel de Allende, Guanajuato. La exposición estará en el Macay hasta enero y se puede visitar de miércoles a lunes de 10 a.m. a 6 p.m. Entrada gratuita.— Claudia Ivonne Sierra Medina

Fuentes: Diario de Yucatán